jueves, 24 de diciembre de 2009

ahora es mía

La última vez que una mujer tan linda entró acá, estaba tan indiferente como esta, pero tenía los ojos cafés. Esta tiene los ojos verdes y su piel blanca (con esos tintes púrpura y verdes que acompañan al tatuaje que le hice hace unos años), pareciera que está durmiendo, las drogas que lleva encima la hacen verse distinta a como la veía siempre, si igual está cambiada. Invité a dos grandes amigos míos cuando supe que esta chica vendría, la verdad es que necesitaba un poco de ayuda con ella. Nos reunimos y le presenté a mis amigos, ella no se opuso a empezar con la sesión, mal que mal la he estado preparando para esto desde hace varios meses. La hicimos acostarse en el mismo “mesón” que uso para tatuar a mis clientes y la hicimos reposar, le hablamos y aún que se veía algo nerviosa, mantenía la seriedad de la reunión.
Con mis amigos comenzamos a observarla y no dejábamos de asombrarnos de su belleza, pero yo no tanto por que ese cuerpo había sido mío antes en otras oportunidades, mucho antes que se hiciera adicta. La tocamos, la movíamos para sentir sus músculos y ella esbozaba una sonrisa nerviosa, nunca antes había pasado ella por esto, pasamos nuestras manos por su abdomen tan bien trabajado, por su cuello tan femenino, por sus manos que algún día pasaron por las mías, fue interesante sentirla así, se creó un ambiente más intimo, que rompió un poco el hielo.
Cuando ya se creó un ambiente de confianza, tomé mi cuchillo regalón y se lo enterré cerca de la boca del estómago y la corté lentamente hasta casi llegar al monte de Venus, luego puse el cuchillo en el mismo punto de partida y le hice dos cortes mas hasta sus hombros, luego uno de mis amigos tomó su propio cuchillo y se acercó a su cabeza, y con mucho cuidado le dibujó un semicírculo de oreja a oreja pasando por su nuca, para no cortar su frente pulcra ni sus cejas bien definidas, ella abrió su boca sorprendida. No esperaba esto.
Fuimos metiendo nuestros curiosos dedos dentro de los cortes de su abdomen y su pecho y desplegamos de a poco su piel hacia fuera, se abrió como un libro dejándonos a la vista lo mas privado que tenía, su verdadero yo interior y cual libro también la estudiamos con cautela. Luego de abrir su piel nos enfocamos en su cabeza, me dio pena ver como algunos de sus cabellos rubios cayeron al suelo cortados por el cuchillo de mi amigo o como otros se mancharon con su propia sangre. Metí mis dedos en el corte de su nuca y cual bolsillo tomé su cuero cabelludo y lo invertí, dejando el cráneo al descubierto y su cara doblada sobre sí misma, su pelo entró en contacto con su nariz y su boca, era como si llevara una mascara. La verdad es que aún que me encantaban sus ojos y la forma de sus labios, no era capaz de sentir su mirada ni de verla a la cara mientras le abría el cráneo con mi sierra circular, le dibuje un círculo al rededor de su cabeza la cual destapé con mucho cuidado para que no se enojara, por supuesto. Tomé su cerebro con mis manos y lo saqué, vi sus nervios ópticos y todas esas conexiones tan interesantes mientras lo sacaba de su cofre óseo. Mientras estaba esmerado en ver sus más profundos pensamientos otro colega buscaba sus sentimientos y emociones, con una sierra separaba sus costillas del esternón hasta que dibujó algo asi como un cuadrado, destapando la cavidad torácica y teniendo acceso a su corazón. Hijo de perra, tantos años que había intentado llegar a él y no daba mas que con su vagina y su sonrisa buena onda. Al final sólo llegue a sus pensamientos pero no a sus emociones, él lo logró a punta de sierra, lástima que a mi no se me ocurrió antes. Mi último amigo estaba más centrado en su abdomen, masajeó y movió sus intestinos y su hígado, ya casi de color naranja, estaba hecho pebre de tanto salir a tomar. Supuse que el mío estaría igual de cocido en alcohol y me reí para dentro.
Cortó el intestino a lo largo dejando ver todo su contenido mientras que yo exprimí su corazón hasta sacar la última gota de sangre. Retiramos uno a uno sus órganos, algunos los cortamos en cuadritos, otros en lonjas como para la sartén, conocí aún más de esta mujer a medida que pesaba cada parte de ella y la guardaba en mis envases. Tuve el placer de tomar su cuello y abrirlo y remover sus órganos de respiración y pulmones en una sola pieza, me costó mucho, pero lo logré. Pensé que iba a sentir más olor a marihuana… pero lo que siempre me asombra es lo negro que salen los pulmones de los fumadores, llenos de hollín como las chimeneas.
Tras una larga y agotadora jornada vaciamos a mi querida amiga, ya no podía reclamar más, volvimos su cara a su posición normal y la cerramos con aguja e hilo como a un saco sellando todos los cortes que le hicimos y luego incineramos sus órganos, salvo algunas secciones de ellos que nos causaron cierto interés y que son parte ahora de mi colección personal. Lavamos su cuerpo con igual cariño con que lo vaciamos y lo entregamos a un tipo de una funeraria. El resultado de la autopsia estará listo en menos de una semana.
Nunca olvidaré las noches que pasé con ella, pero hoy lejos, fue donde más la sentí parte de mi.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Obeso




Si, estoy más obeso que la mierda, peso 20 y tantos kilos demás, estoy a punto de alcanzar los 110 kilos, es increíble cómo ha cambiado mi cuerpo. Uno no se da cuenta cuando empieza a engordar, debe ser la misma weá de la anorexia, no te dai cuenta como te transformas en esqueleto…acá es lo mismo pero te transformas en una maldita montaña de adiposidad.

Todo partió cuando hacía deporte, en esa época andaba a todos lados en bicicleta, corría por la autopista, luego empecé a hacer pesas…la raja

Después mi hijo, la pega, la moto, el carrete (si, mi hijo y el carrete son coetáneos, es más, uno no pudo haber sido sin el otro) seguía comiendo igual pero ya no hacía nada de ejercicio, puro trabajar y estudiar y empecé de a poquito a subir, la cagó ahora soy una maldita morsa.

Pero no estoy acá para llorar por lo obeso que estoy, pues es una condición temporal (que según mis planes, tendría su última etapa ahora el 2010), sino para relatar como es la vida de alguien con la terrible guata.

Primero, pasas de ser el compadre, el de barba, el Jorge, el pelao y ahora eres el guatón. Es la única cualidad de mierda visible, podí tener el hocico como basurero y los ojos mas trucha que la mierda pero nada. Como tu grasa aumenta en todo el cuerpo, también lo hace alrededor de la tula, eso hace que se vaya hundiendo en ese mar de lípidos, de hecho una intervención quirúrgica para “agrandar la callampa” donde realmente te hacen una lipoaspiración en esa parte que rodea a la tula, entonces la piel retrocede y como que descubre a aquel que estaba hundido. Pero si estas obeso esa intervención no sirve de nada, y te la encuentras chica (aun que de hecho con guata y todo el tamaño sea respetable….se ve desproporcionado, siempre se va a ver chica). Eso da pié a que no te atrevas a tener relaciones sexuales con otra persona, por temor al ridículo (gordo y micropene, ni cagando) y eso cala hondo en la weá del autoestima (si, el autoestima, esa cosa que inventaron unos sicólogos para los débiles-mentales). Lo otro son las tareas cotidianas, como vestirse, agacharse a recoger una weá, abrocharse los zapatos… imagina ponerte una mochila de 15 kilos al revés, así como emulando una guata, y trata de abrocharte los zapatos… así de penca. Subes escaleras y te cansas mas que la mierda, tus amigos (¿?) te agarran las tetas (por que ahora tienes tetas), y de sexo ni hablar, un porcentaje importante de guatones de nacimiento son vírgenes hasta al menos los 30 años (fuente: ninguna) por que a las minas no les gustan los guatones y por que estos lo saben, asi que ni lo intentan. Los problemas de salud son otra cosa, pero todos saben…

Al final la ropa no está hecha para ti, los lentes tampoco, los zapatos menos, ni los autos, ni las camas, de hecho, ni las camillas de las ambulancias ni las tumbas.

Pese a que sabes que vales callampa, eres feo y que tu pene es anormalmente pequeño, te cuesta lavar tus pliegues cuando te duchas (por que no cabes en la tina) y que nadie cree que eres tú cuando ven tu foto de graduación de 4º medio, te da lo mismo, total, o tu sabes que vas a bajar pronto o tienes la certeza que el 2012 van a morir todos.